Tengo pendientes varias crónicas de algunas carreras, así que mejor empezar cuanto ántes, no sea que la memoria vaya fallando.
En esta ocasión es de la carrera que se celebra en Barcelona de noche y por el parque natural de Collserola con salida y llegada al parque del Tibidabo.
Se trata de la Midnight Trail BCN, en su 2ª edición tras el éxito de la primera, que ha hecho que se repita y con pintas a ser una fija cada año.
A raiz de mi primilla y una compañera suya que participó el año pasado, me enteré de que montaban esa carrera. Así que visto lo visto tanto yo como mi colega Julio nos apuntamos sin pensar mucho.
Una semana ántes a la carrera y con el track en la mano fuimos a "testear" como sería el recorrido también de noche, más que nada, para verificar si Julio podría participar con las zapas de running normales ya que no dispone de trail.
Tal como me imaginaba el recorrido al completo es casi todo pista (Psg de les Aïgues, Camí del Bon, etc...) y no hay ningún problema en correr con las de asfalto.
Hace una noche magnífica. Algo de fresco pero una temperatura genial para correr. Voy sin muchas ganas ya que me quería reservar y no hacer el burro ántes de la Behovia-San Sebastián.....pero ya se sabe que a veces el cerebro no rige, y comienza a mandar el corazón y los impulsos...
Salíamos en el 2º grupo y nos posicionamos casi al final del todo. Mi intención era ir tranquilo y haciendo fotos conjuntamente con Julio y varios amigos que nos encontramos allí.....pero nada más lejos de la realidad.
Dan la salida y a correr. Sabia que en el primer trozo habría un tapón importante debido a un corriol estrecho. Nos paramos y parece la entrada al metro en hora punta. Me veo bastante bien y deseando empezar a correr.
Se pierde muuuucho tiempo en ese corriol y en cuanto salgo disparado a un ritmo alto. Voy adelantando a mucha gente hasta el km 7 donde está el mayor desnivel de toda la prueba incluída subida por escaleras. Caminando rápido sigo avanzando hasta llegar arriba y a correr de nuevo.
Avituallamiento y no paro. Me tomo un gel de los míos y sigo a toda mecha, hasta los últimos 2 km, donde el sobreesfuerzo me empieza a pasar factura, tengo un pequeño bajón, y bajo el ritmo hasta los últimos metros de meta que son en una rampa considerable al Tibidabo.
Buena carrera con muy buenas sensaciones aunque no iba para eso, y visto que si hubiera salido más adelante sin pillar tanto tapón en el corriol podría haber marcado mucho mejor tiempo.
Seguramente el año que viene repetiremos. Esta al lado de casa y es una carrera diferente y apta para todos los públicos. Muy divertida al ser nocturna y mucha gente para disfrutar con amigos tranquilamente ;)
Lo único que no me gusto, y que reporté a la organización, fué la fiesta "After-Run" que anunciaron a bombo y platillo.
Varios amigos nos acompañaron con la idea de después de la carrera poder disfrutar todos juntos de un par de cervezas, la música, etc.....o incluos mientras esperaban nuestra llegada, y nada más lejos de la realidad. Nos quedamos con un palmo de narices al ver que la música en directo acabo rapidísimo y no había ningún tipo de servicio para los acompañantes, ni barras, ni nada. No podían ni pedirse una cervecita o refresco. Solo había un refresco/cerveza para los corredores, y listo.
Una pequeña decepción sobretodo para lo sacrificados que ya son de por sí nuestros acompañantes. Que mínimo que tener servicios, y más cuando en la publicidad parecía precisamente que existiría.
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